El Banco Central de Reserva (BCR), que se reúne este jueves, podría subir nuevamente su tasa de referencia, la cual al día de hoy se ubica en 6%, luego de doce aumentos desde agosto del 2021.
Cabe resaltar que las expectativas de inflación a doce meses cayeron a 5.16% en julio, luego de haber alcanzado un máximo el mes pasado (5.35%). Por otro lado, las expectativas de este indicador para el 2022 se elevaron a un rango de 6.50%-7.45%, y para el 2023 se encuentra entre 3%-3.65%, por encima del límite superior del rango meta del BCR (1%-3%).
Según el exministro de Economía y Finanzas, David Tuesta, se esperaría que el BCR haga un ajuste, pero no importante, sino alrededor de 25 puntos básicos. Ello teniendo en cuenta la reducción de las expectativas a doce meses y un menor dato de inflación en julio.
La inflación anual a doce meses fue de 8.7% en julio, la cual se redujo ligeramente frente a junio (8.8%). Analistas señalaron que el sexto mes del año fue el pico del registro, por lo que se esperaría que haya un retorno gradual a la meta desde ahora.
“Efectivamente, las expectativas se han reducido, pero el escenario de inflación continua estando alto, muy alejado de su meta. Dentro de los escenarios que está barajando el BCR seguro está considerando dejar la tasa donde está o un ajuste adicional ligero. Se espera que el escenario de precios se vaya estabilizando en la segunda parte del año, y se retorne a la meta a inicios del 2024. Es posible que la tasa se comience a estabilizar también y esté un poco por encima del 6% hasta el 2023′′, apuntó.
Tuesta explicó que uno de los factores que podría contemplar el banco central para un nuevo aumento de tasas es la inyección de liquidez a través del nuevo retiro de los fondos de pensiones y de la Compensación por Tiempo de Servicio (CTS).
“La inflación alta puede verse también impulsada por la liquidez en grandes cantidades que dan las AFP (los retiros) y CTS. Hay casi un punto y medio o dos del producto que están ingresando pronto a la economía, y sería un factor que tomaría en cuenta el BCR para sus aumentos adicionales (en su tasa)”, anotó.
Por su parte, el BCP y Scotiabank esperan que el banco central eleve su tasa de referencia en 50 puntos básicos hacia 6.50% en su reunión del 11 de agosto.
“El mercado estará muy atento al comunicado del BCR sobre sus próximos movimientos de tasa. Creemos que recién podría empezar a recortarla el próximo año. En el 2023, la inflación cerraría alrededor de 3.5%, nuevamente fuera del rango meta”, indicó el BCP.
La inflación a doce meses de julio ha empezado a descender, pero no tanto como se anticipaba, pues se creía que el dato sería de 8.5%. Del mismo modo, las expectativas de inflación empezaron a quebrar, pero aún son mayores a 5%. Esto sugeriría un nuevo aumento en las tasas posiblemente en otros 50 puntos básicos, señaló Hugo Perea, economista jefe del BBVA Research.
“Por otro lado, se tiene una economía que se está desacelerando (de enero a abril se ha tenido caídas del PBI mes a mes, si se observan los índices desestacionalizados, según el BCR), y el único soporte que tiene está en el consumo vinculado a una expansión fuerte en los créditos y los retiros de los fondos previsionales, situación que no se puede sostener. La parte de actividad también es considerado por el BCR; no obstante, teniendo ello en cuenta, el movimiento sería el alza el jueves”, indicó.
Según el último informe de Consensus Forecast LatinFocus de julio del 2022, el consenso de analistas proyecta una tasa de referencia de 6.49%, por lo que se proyectan aumentos por parte del BCR. No obstante, son ocho las entidades que no esperarían que se de uno el jueves (proyectan que se quede en 6% hasta fin de año), asumiendo que no han actualizado su proyección en los últimos días (Scotiabank subió su proyección de 6% a 6.5% en la segunda parte de julio).
MEF sobre aumento de tasas del BCR
El nuevo ministro de Economía y Finanzas, Kurt Burneo, aseveró que la economía se ralentiza debido a que el BCR eleva la tasa de interés de referencia como una medida para contener la inflación.
“En ese punto creo que deberíamos tener una conversación con el BCR, porque lo que está haciendo es elevar mes a mes la tasa de interés, lo que está significando el encarecimiento del crédito y, por lo tanto, ralentiza el consumo y la inversión”, precisó.
Al respecto, Tuesta mencionó que, si bien el aumento de tasas tiene un efecto a través de los mayores costos de financiamiento, señaló que el principal impacto en la economía viene por el lado de las expectativas pesimistas por parte de los agentes privados, lo que se relaciona con el aspecto político.
“Más allá de los ajustes del BCR, los créditos se han mantenido dinámicos. La economía más lenta pasa por la contracción que se espera para la inversión privada (BCR espera crecimiento de 0%, otras entidades como el BBVA Research esperan una contracción de 1.5%), debido a mensajes de quiebre institucional desde la esfera política”, indicó.
En relación a ello, Perea mencionó que el BCR aún no es contractivo con el avance de sus tasas si se tiene en cuenta la tasa de interés real hasta ahora.
“La tasa de interés real (tasa de interés de referencia descontada de las expectativas de inflación) que el BCR considera neutral (donde la política monetaria no es expansiva ni contractiva) es de 1.5%, y hoy se está en 0.8%; es decir, ligeramente expansiva. Aún hay margen en el que el banco no es contractivo, y ello hace creer que seguirá subiendo su tasa para consolidar el descenso en las expectativas de inflación”, explicó.
Por otro lado, Tuesta se refirió a la corrección de la proyección de crecimiento que anunció Burneo. En particular la pasó de 3.6% a 2.2% (la nueva estimación será oficializada en el Marco Macroeconómico Multianual, el cual se publicará a fin de mes) y destacó que el crecimiento debería ser de 5%.
“Perú debería crecer un 6% o 7%, con una inversión privada que debería haberse consolidado en la reactivación económica y crecer 20%. La proyección que tiene ahora el MEF es más realista. Sin embargo, el que se pase de 3.6% a 2.2% significa que alrededor de 300 mil personas no saldrán de la pobreza este año”, puntualizó.
Fuente: GESTIÓN.