Para el 2024, el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP) proyectó que la inversión minera se elevaría en 5.1% frente a los US$ 4,700 millones del 2023. Desde el Ministerio de Energía y Minas (Minem), la expectativa es aún más alta, apuntando a un incremento de 14.9% a US$ 5,400 millones. ¿Qué empresas del sector anunciaron inversiones de manera concreta?
En el Gobierno, la perspectiva considera el destrabe de algunos proyectos de cobre y otros polimetálicos. En iniciativas enfocadas en el metal rojo, Gestión reportó que Chinalco estima la finalización de las obras de Ampliación Toromocho (Junín), por US$ 1,355 millones, en abril del 2024. Su comisionamiento (puesta en marcha) se realizaría en junio.
Por su parte, MMG Las Bambas preveía el inicio de desarrollo del tajo Chalcobamba (Apurímac) a fines del 2023 y el Ejecutivo confía en su ejecución en este año. En tanto, Antamina espera iniciar su proyecto de ampliación de vida útil “Reposición Antamina” (Áncash), por US$ 2,000 millones.
De igual manera, Southern Perú mira una inversión superior a los US$ 400 millones del 2023 para sostenimiento de actuales minas, exploración en Michiquillay (Cajamarca) y estudio de impacto ambiental en Los Chancas (Apurímac). De poder iniciar Tía María (Arequipa), el gasto en el primer año de esta iniciativa llegaría a US$ 150 millones.
En la zona sur, Compañía Minera Antapaccay prevé la ampliación del botadero de la mina del mismo nombre en Cusco, aguardando los permisos ambientales de Integración Coroccohuayco (Cusco) por más de US$ 1,500 millones para fines del 2024.
Polimetálicos y otros minerales
En otros proyectos, Buenaventura anunció US$ 300 millones de inversión este 2024 para continuar con la iniciativa de oro San Gabriel (Moquegua), el desarrollo del proyecto de plata Yumpag (Pasco) y otros gastos de mantenimiento.
De igual manera, Bear Creek prevé iniciar obras tempranas de proyecto de plata Corani (Puno), cuyo capital inicial asciende a US$ 579 millones y permitiría poner en valor uno de los yacimientos de su tipo más grandes del mundo. Por su parte, Hochschild proyectó una inversión de entre US$ 133 millones y US$ 136 millones en su mina de oro y plata Inmaculada (Ayacucho), que en agosto último recibió la luz verde para la ampliación de su vida útil.
En tanto, Paltarumi previó abrir una nueva planta de procesamiento de oro cerca de su mina de Pataz (La Libertad); Alpayana apuntó a la reactivación de la mina polimetálica Morococha (Junín) y Minsur proyectó un capital de hasta US$ 400 millones para la mina de estaño San Rafael (Puno) en cinco años desde el 2024, enfocados en gastos de sostenimiento.
¿Y el proyecto de litio?
A fines de noviembre último, la canadiense American Lithium Corp presentó el estudio inicial de permiso ambiental de su proyecto de litio Falchani (Puno), esperando su aprobación en los próximos meses. Así, confió en que los permisos de construcción puedan acelerarse.
Sin embargo, la filial local Macusani Yellowcake estimó dos meses antes que la evaluación del estudio de impacto ambiental (EIA) para la explotación del recurso podría tomar hasta inicios del 2026. Luego, la empresa comenzaría la construcción de las instalaciones de la mina para operar desde principios del 2027.
Fuente: GESTIÓN.