Los organizadores de una de las conferencias más grandes de la industria del cobre prevén un aumento del 60% en la participación este año tras el levantamiento de las restricciones de viaje y la transición energética elevando el perfil del metal.
Una medida del éxito de la Semana Cesco —que comienza en Santiago de Chile a partir del 17 de abril e incluye la Conferencia Mundial del Cobre de CRU— es la asistencia a una cena.
Está previsto que llegue a 1,600 personas este año en comparación con las 1,000 del año pasado, dijo Jorge Cantallopts, director ejecutivo del centro de investigación del cobre detrás de los seminarios y eventos sociales de la próxima semana.
El interés ha sido fuerte y la gente se pregunta si la industria podrá satisfacer el crecimiento de la demanda generada por el alejamiento de los combustibles fósiles y el impacto de los cambios geopolíticos, dijo Cantallopts en una entrevista telefónica.
Los precios del cobre están demostrando ser bastante resistentes a los problemas bancarios globales y a la ralentización de la demanda china, cotizando alrededor de US$ 4 la libra mientras las reservas siguen siendo escasas, dijo Cantallopts.
Los precios podrían alcanzar fácilmente los US$ 5 una vez que “las aguas financieras se hayan calmado”, indicó. El repunte en la negociación en la industria muestra tanto la confianza en el mercado como la falta de oportunidades de crecimiento orgánico, agregó.
Envíos chilenos suben ante escasez
Los envíos de cobre chileno se recuperaron en marzo tras las interrupciones en los dos primeros meses del año, un impulso bien recibido ante la escasez de suministros mundiales del metal.
Los ingresos procedentes de las exportaciones de cobre de la principal la nación productora aumentaron un 33% respecto al mes anterior, alcanzando el nivel más alto en más de un año, a pesar de que los precios retrocedieron levemente en promedio, según datos publicados por el banco central este lunes.
Las cifras sugieren que la producción se está recuperando después de caer a un mínimo de seis años debido a las restricciones de agua, una serie de contratiempos operativos y retrasos en los proyectos. Eso supondría un alivio para acciones en los almacenes de la Bolsa de Metales de Londres, que están cerca del nivel más bajo en 18 años, dado que Chile representa una cuarta parte del cobre que se extrae.
Fuente: GESTIÓN.