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17 de octubre de 2025
Tecnología

Del papel al app en semanas: cómo el low-code está transformando industrias clave en América Latina

Crear soluciones tecnológicas ya no es un privilegio exclusivo del área de TI. Plataformas de desarrollo low-code —que permiten crear aplicaciones arrastrando y soltando elementos visuales— están acelerando la transformación digital en múltiples sectores. En los últimos años, su adopción global creció más de 40% y ya supera los 48 millones de usuarios activos, según cifras compartidas por expertos del sector.

“Estamos viendo cómo el low-code deja de ser una promesa y se convierte en una herramienta real de innovación. Empresas de distintos sectores piden soluciones que antes habrían tardado meses, y con estos avances logramos desarrollarlas en cuestión de semanas”, afirma Ariel Hitner, Delivery Manager en Softtek.

Industria alimentaria: del papel al dato en tiempo real. Una empresa de lácteos en Centroamérica que llevaba el mantenimiento de sus máquinas en fichas de papel migró a una aplicación low-code para digitalizar por completo su proceso. “Pasaron de tener cero trazabilidad a poder anticipar fallas y evitar paradas en planta. Con la app, toda la información está centralizada y disponible en tiempo real, lo que transformó por completo su operación”, explica Hitner.

Construcción: reclutar sin perder tiempo. Una empresa del sector construcción necesitaba contratar a más de 100 personas en menos de dos meses tras ganar una obra de gran escala. “Desarrollamos una versión básica y funcional de la aplicación en solo cuatro semanas, que les permitió gestionar postulaciones, documentos y validaciones. Esa solución resolvió el problema inmediato y luego evolucionó en un ecosistema con decenas de aplicaciones conectadas”, señala.

Sector público: innovación desde el usuario. En El Salvador, un abogado del sistema judicial —sin formación en desarrollo— creó por su cuenta una aplicación para mejorar la gestión en los juzgados. “Ese caso fue especialmente potente porque muestra que no es necesario ser técnico para generar impacto. Lo que se necesita es conocer bien el proceso que se quiere mejorar”, dice Hitner.

Recursos Humanos: onboarding sin fricción. Algo similar ocurrió con una empresa tecnológica que automatizó su proceso de incorporación de personal. Antes, los nuevos colaboradores recibían comunicaciones desordenadas y no sabían en qué etapa se encontraban. Con una solución low-code, se automatizó todo el flujo de onboarding: desde la carga de datos hasta las notificaciones al supervisor.

“Lo que antes generaba ansiedad, ahora es una experiencia fluida. La app se construyó desde el equipo de recursos humanos con acompañamiento técnico, pero sin depender por completo del área de TI”, detalla el especialista.

Estas plataformas también permiten integrar inteligencia artificial, automatizaciones, analítica y conectores con sistemas externos. Pero como toda herramienta potente, su uso requiere ciertas reglas. “El low-code funciona mejor cuando hay un modelo de gobierno claro. Si no se gestiona bien, se corre el riesgo de que cada área cree sus propias soluciones sin control, lo que puede generar fugas de datos o uso ineficiente de licencias”, advierte Hitner.

El futuro, sin embargo, ya está sucediendo. “Lo que antes tomaba meses hoy se puede resolver en semanas o días. Y lo más interesante es que las soluciones ya no vienen solo del área técnica: con el enfoque adecuado, cualquier área del negocio puede convertirse en motor de innovación”, concluye.

En Perú, cada vez más empresas medianas están explorando este tipo de plataformas para resolver procesos internos sin depender de desarrollos costosos o externos, especialmente en sectores como retail, banca o servicios.

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