Antofagasta Plc estima que existen “buenas oportunidades” para expandirse fuera de Chile en medio de una búsqueda de nuevos depósitos de cobre que se intensifica a medida que aumenta la demanda mundial del metal para cableado, crucial en la transición para alejarse de los combustibles fósiles.
Si bien la firma que cotiza en Londres sigue enfocada directamente en el desarrollo de activos existentes, tiene pequeños equipos en Canadá, Estados Unidos y Perú que buscan oportunidades en etapas iniciales, dijo su presidente ejecutivo, Iván Arriagada, en una entrevista en Santiago. Las opciones incluyen asociaciones con empresas júnior y la adquisición de derechos sobre la tierra.
La empresa, controlada por la familia más rica de Chile, actualmente produce todo su cobre en el país, donde las iniciativas para aumentar los impuestos y redactar una nueva Constitución han hecho que algunas empresas posterguen sus decisiones de inversión. Antofagasta busca mayor certidumbre fiscal, entre otros factores, antes de proceder con una inversión de US$ 3,700 millones en una de sus minas en Chile.
“Tenemos muchas ganas de ver a Antofagasta como una empresa que puede tener una presencia más global, no porque no nos guste la base que tenemos aquí, que es excelente y seguimos creciendo”, dijo Arriagada. “Así mismo, hay buenas oportunidades afuera que queremos evaluar”.
Hasta ahora, la incursión de Antofagasta fuera de Chile ha sido complicada. Se retiró de una empresa en Pakistán después de que las autoridades le negaran una licencia para desarrollar un enorme depósito de cobre y oro, lo que dio paso a una larga disputa legal.
Luego, el año pasado, la Administración Biden canceló los derechos de la empresa para extraer cobre, níquel y cobalto en Minnesota. Arriagada espera que un impulso de Estados Unidos para obtener minerales fundamentales localmente ayude a su causa en Minnesota.
A medida que se vuelve más difícil desarrollar nuevos depósitos de cobre y la demanda se acelera en medio de la transición hacia la energía limpia, importantes productores como BHP Group y Glencore Plc recurren a adquisiciones para crecer.
En medio del repunte de los acuerdos en el sector, Antofagasta sigue abierta a oportunidades que se comparan favorablemente con posibilidades de crecimiento orgánico, dijo Arriagada.
Por el momento, está enfocada en poner en marcha una planta desalinizadora antes de fines de mayo para permitir que el procesamiento en la mina más grande de la compañía, Los Pelambres, regrese a plena producción.
A pesar de una caída trimestral de la producción, Antofagasta se dirige a cumplir con su directriz anual. Dependiendo de cómo avancen los proyectos, la compañía podría elevar su producción anual a 900,000 toneladas métricas para 2026 o 2027, frente a las 646,200 del año pasado, dijo.
Fuente: GESTIÓN.