Aun con los problemas de algunas minas de cobre para transportar mineral por conflictos sociales en el 2022, la producción del metal rojo creció 4.8% el año pasado con operaciones como Antamina (Áncash), que aportó el mayor volumen de ese recurso. Sin embargo, la vida de esta operación va acercándose a su final (2028) y para continuar en actividad esperaba la aprobación de la Modificación del Estudio de Impacto Ambiental (MEIA) hasta abril del 2023, a fin de extender su vida hasta el 2036. No obstante, la luz verde no llega y los plazos se revisan.
Conozca el nuevo calendario del proyecto y la situación de la actual operación, en entrevista con el CEO de Antamina, Víctor Gobitz (VG) y su vicepresidenta de Salud, Seguridad y Medio Ambiente, Fabiola Sifuentes (FS), tras la presentación del proyecto en el Instituto de Ingenieros de Minas del Perú (IIMP).
Hasta el año pasado, Antamina proyectaba la aprobación de su segunda MEIA para extender la vida de la mina, a fines del 2022 o hasta abril del 2023, ¿ya no será así?
VG: Ahora esperamos que sea en el último trimestre del año. La demora tiene que ver con las rondas de observaciones que siempre se generan. Hemos pasado la primera ronda, estamos en la segunda, pero dado el tiempo transcurrido y que son no menos de tres rondas, la proyección (de la fecha de aprobación final) ha cambiado.
¿Se estimaba que las observaciones lleguen en tiempos menores?
VG: Claro, el texto único de procedimiento administrativo así lo indica, pero los plazos no se cumplen.
FS: El proceso de observaciones está tomando tiempo por el entendimiento del volumen de datos que se solicita. Estamos en coordinación con el Senace, viendo la manera de optimizar esto, para que las observaciones sean menores. Son muchas autoridades opinantes y Senace integra la información.
La aprobación se estimaba en un año. Ya vamos casi año y medio. Nos llegó la primera ronda de observaciones (700) en diciembre y respondimos en enero. Estamos esperando que regresen a mediados de abril con la segunda ronda de observaciones para responder en 10 días útiles.
¿Qué tipo de observaciones son?
FS: Hay de todo, principalmente vienen asociadas a mayor detalle del desarrollo del componente minero, de cómo será el botadero, la presa de relaves y también que expliquemos un poco más acerca de las medidas de manejo ambiental y social que está proponiendo el documento.
En tanto, se supo que la inversión subió a US$ 2,000 millones, ¿a qué responde?
VG: Se hizo una observación metodológica (en el documento presentado). En los ocho años de extensión de vida habrá una inversión menor de sostenimiento por US$ 50 millones al año, que resulta en US$ 400 millones y es lo que se suma a los US$ 1,600 millones (informados inicialmente). Senace nos pidió que sumáramos las cifras. Es el único cambio que se ha introducido en referencia a la inversión.
Ahora, ¿cómo corren los plazos para la ampliación de la vida de Antamina?
VG: Si logramos tener eso (la aprobación del MEIA) hacia finales de este año, todo el 2024 será para gestionar los permisos de construcción. Algunos son más sencillos que otros, pero es un trabajo adicional. Un trámite adicional. En algunos casos hay obras que pueden ser muy tempranas (y se pueden iniciar) en el segundo trimestre del año 2024.
Así, ¿hacia qué año avizoran tener lista la ampliación? VG: Diría más hacia el 2027.
¿Cómo ven esta situación los accionistas (BHP Billiton, Glencore, Teck y Mitsubishi) de Antamina?
FS: La aprobación de este MEIA sería un mensaje muy positivo para los accionistas, para comenzar a habilitar de alguna manera las inversiones para hacer estudios de una posterior ampliación de vida de Antamina. Eso sería un espaldarazo para el país, se puede, es viable, seguir invirtiendo en Perú, y nos ayudaría a ver cómo podemos proyectarnos a una nueva extensión.
Luego de la suspensión de operaciones el 2021 por el paro de comunidades en la zona, ¿cómo trabajan en la gestión social para evitar que un suceso así interrumpa el proyecto de ampliación?
VG: Tenemos mesas de diálogo y desarrollo, y a través de esos espacios tratamos de lograr entender cuáles son las expectativas de las comunidades y lograr acuerdos en ese sentido.
Producción e inversiones actuales
¿Cuál fue la producción de cobre de Antamina el 2022 y qué expectativas hay para el 2023?
VG: El 2022 fue muy similar a años previos (produjo 467,905 toneladas métricas finas, con un crecimiento de 1.6% frente al 2021). Para este año, también sería muy parecido.
Al margen del capital previsto para la ampliación de la vida de mina, ¿hay inversiones este año?
VG: Sí, son inversiones de sostenimiento importantes que estamos llevando a cabo. En capex, tenemos un rango de entre US$ 250 millones y US$ 300 millones, similar a años previos.
¿En que se enfoca ese presupuesto?
VG: En infraestructura de mina y equipamiento, renovación de
equipos.
¿Hay activos y/o proyectos de exploración más allá de la zona de Antamina?
VG: Ahora estamos enfocados muy en la huella operativa (actual zona) de Antamina.
Escenarios futuros
Se conoció que Antamina ya empieza a mirar operaciones inclusive hasta el 2050, ¿sería parte de un posterior MEIA?
VG: No es el momento aun de ponerle fecha (a una siguiente ampliación), pero aprobado ya este MEIA, que esperamos sea este año, en el último trimestre, estaremos trabajando un proyecto para presentar un subsiguiente MEIA que va a extender la vida, en un plazo que no puedo adelantar si será al 2050 o 2060.
FS: Una vez que aprobado este MEIA, nos habilitaría la posibilidad de estudiar una nueva extensión de vida. Antamina tiene la potencialidad del recurso minero. Hay que hacer el estudio para su MEIA y pasar los permisos.
¿Todavía está en una fase conceptual?
FS: Estamos aún en la definición de la estrategia, y es crítico para ello
la aprobación del actual MEIA.
Además, la compañía comentó previamente que exploraba la opción de una operación subterránea, ¿vendría en el subsiguiente MEIA?
VG: En esa extensión de vida aún no está todavía el concepto subterráneo. Es una posibilidad en un escenario aún mucho más posterior.
FS: Todavía está en estudios, como una de las alternativas para seguir buscando extender la vida de la mina más allá del 2050. La actual extensión (hasta el 2036) es con tajo abierto y la posibilidad de habilitar una nueva extensión (hasta el 2050) sigue siendo con tajo abierto. Más allá del 2050, tendríamos que ver dónde encajaría la otra posibilidad, puede ser más tajo abierto o una mezcla. No me cerraría solo a que sea subterráneo, pero hay que ver qué más podemos hacer para seguir sacando mineral de manera sostenible.
Fuente: GESTIÓN.
