El Gobierno aprobó el pasado 3 de abril de 2022 el aumento de la Remuneración Mínima Vital (RMV) de los trabajadores sujetos al régimen laboral de la actividad privada. El incremento de S/930 a S/1,025 mensuales entra en vigencia a partir de este mes.
Si bien dicho aumento parece razonable debido a la mayor inflación a nivel nacional (8.62% anual a abril 2022), para Jorge Carrillo Acosta, profesor y experto en finanzas de Pacífico Business School, la medida generará un sobrecosto para muchas empresas, sobre todo para las mypes, “incentivando” la informalidad laboral.
“Se debe tener en cuenta que, el incremento de S/ 930 a S/ 1,025, implica un mayor costo laboral de casi S/ 1,600 anuales para el empleador, considerando que, además de los 12 sueldos, también se tendrá que incrementar las gratificaciones, la CTS, el aporte a Essalud, la asignación familiar, el seguro de vida ley, entre otros beneficios”, agrega el especialista.
Informalidad
En ese sentido, Carrillo Acosta apunta que esta nueva medida tomada por el Gobierno podría ser contraproducente, ya que generaría una mayor informalidad laboral.
Como se sabe, hasta abril de este año, el sueldo bruto mensual era de S/ 930, pero, restándole el descuento de AFP u ONP (13% aproximadamente), el trabajador recibía alrededor de S/ 810 netos.
No obstante, con la nueva remuneración mínima vital, el sueldo bruto desde este mes sería de S/ 1,025, pero el neto sería de S/ 890.
Dicho esto, la propuesta del empleador podría ser pagarle al trabajador los S/ 930 directos en el bolsillo, pero “por fuera” de la planilla (de manera informal), con lo que, el colaborador recibiría (aparentemente) más dinero en el bolsillo (S/ 930 en vez de S/ 890) y el trabajador se ahorraría el mayor costo laboral.
No obstante, otra medida que podría tomar la empresa es despedir trabajadores, generando un perjuicio mayor al beneficio que se pretendía conseguir.
Fuente: GESTIÓN.