En entrevista a Gestión, el CEO de Cálidda, Martín Mejía, explica los detalles de su nuevo proyecto, como una iniciativa privada autosostenible, que no necesitaría mayor subsidio estatal, pero que permitiría el uso del gas natural en provincias con la misma tarifa que se cobra en Lima y Callao.
-Cálidda quiere llevar el gas natural más allá de su área de concesión en Lima y Callao, ¿qué plantean?
Estamos proponiendo al Gobierno que Cálidda pueda extender su servicio de distribución de gas natural a las 14 ciudades del exproyecto de distribución de ese combustible en siete regiones, que incluye a los departamentos de Junín, Apurímac, Ayacucho, Ucayali, Cusco, Puno y Huancavelica.
-¿En qué consiste su proyecto?
En tender, operar y dar mantenimiento a redes de distribución del gas natural frente a unas 200,000 viviendas, primero a unas ocho ciudades (del total de 14) de esas regiones en una fase inicial, lo que se podría hacer en un plazo breve, a más tardar de dos años, a fin de dar el servicio (en esa primera etapa) a unos 800,000 peruanos.
-¿A qué ciudades podrían llegar?
Lo que estamos proponiendo es un compromiso de hacer por lo menos 2,400 kilómetros de redes iniciando en ocho ciudades como son Pucallpa, Huancayo, Huancavelica, Huamanga, Andahuaylas, Abancay, Cusco y Puno.
-¿Cuál es la necesidad de ello?
Desde el 2014 el Gobierno ha estado intentando a través de ProInversión licitar el servicio de gas natural en dichas regiones. Sin embargo, esas iniciativas se declaraban desiertas ante la ausencia de interés de los postores, a pesar de que las evaluamos y participamos, así como lo hicieron otras empresas como YPFB de Bolivia, e incluso compañías chinas.
-¿A qué se atribuyó esa falta de interés?
A la escasa demanda de gas natural. En estas regiones, donde sus principales actividades son el comercio, la agricultura y el turismo, no requieren de mayor energía, pero la inversión que se necesita para hacer redes del servicio, realizar su operación y mantenimiento es bastante onerosa.
Iniciativa Privada Autosostenible
-¿Cómo surge la propuesta que plantean?
Nace como una iniciativa privada autosostenible que permitirá que se puedan construir redes en esas ciudades, dar el servicio sin tener que depender de más subsidios para poder hacerlo, poder concretar así un proyecto que el Gobierno está intentando hacer realidad desde hace más de una década.
-¿Por qué es autosostenible?
Porque para poder atender a estas regiones la empresa no va a necesitar más que mezclarlas con nuestra concesión actual, y no va a requerir de mayores subsidios del Estado (de los que ya viene dando actualmente vía el fondo FISE). Al mezclar la demanda en ciudades del interior con la que existe en la ciudad capital se hace que este esquema sea autosostenible
-El Ministerio de Energía y Minas (Minem) por ejemplo está construyendo redes de distribución de gas y planea hacerlo en algunas de las siete regiones, ¿Cuál sería la diferencia con la propuesta de Cálidda?
Si hoy día el Estado construyera directamente las redes tendría que destinar recursos públicos y si quisiera operar y mantener esa estructura de distribución cobrando las mismas tarifas que tenemos en Lima, tendría que dar un subsidio adicional todos los años para atender a esa población.
-¿Qué otra diferencia tiene su propuesta con el proyecto original de masificar el gas en siete regiones?
Esto es más grande que el proyecto original de siete regiones que incorporaba como obligación conectar a 115,000 usuarios. Nosotros vamos a tender redes para hacer 200,000 conexiones, que es mucho más de lo que propuso el Ejecutivo, e inicialmente calculamos que se podrían conectar a unos 135,000 consumidores. En cualquier caso, las obras que haga el Minem para extender redes de distribución, son complementarias a nuestro proyecto.
Tarifas de gas natural en regiones
-Se entiende que para su proyecto no necesitarían más subsidios, pero ¿y las tarifas?
Con nuestra propuesta no necesitan de ese subsidio adicional ni para la operación ni mantenimiento, pues como nuestra solución es integral, al mezclar el servicio que damos en Lima y Callao con las de esas ciudades del interior, se permitirá brindarlo a las mismas tarifas que tenemos en la capital, que es más barata comparada con otras regiones a nivel nacional.
-¿Qué beneficios tendrían los usuarios en esas ciudades a las que quieren incorporar?
La tarifa sería muy competitiva versus la del gas envasado en balones. Creemos que estará 50% más barata que el precio que se paga por el gas propano que hoy se vende en esas regiones.
-Dice que no se requerirán subsidios, pero fue precisamente con estos que en Lima se pudo abaratar los costos de conexión interna domiciliaria y extender su consumo. ¿Cómo se pagarán las conexiones en domicilios en las regiones?
Hay una norma que ha ampliado el Fondo de Inclusión Social Energético (FISE) para que los usuarios de provincias sin importar el nivel socioeconómico puedan acceder al subsidio que permite pagar el costo de la conexión interna en los hogares.
Transporte del gas a regiones
-Un problema es el transporte del gas natural desde las zonas de producción de ese insumo hasta esas ciudades, ¿cómo resolverían eso?
Hay dos zonas urbanas donde no se necesita gasoductos virtuales o camiones especiales que permitan llevar ese combustible. Una de ellos es Ayacucho, que tiene una línea (tubería de gas) que llega hasta la ciudad de Huamanga, donde habría que construir un City Gate para poder reducir las presiones a las que llega el gas y desde allí ya construir las redes de polietileno dentro de la ciudad lo cual se podría hacer rápidamente.
-¿Cómo le llegaría el gas desde su zona de producción?
Va a recibir gas directamente del yacimiento de Camisea a través del ducto de TGP (Transportadora de Gas del Perú), y nos lo entregaría en la ciudad de Huamanga.
-¿Eso significa que ya han tenido conversaciones con TGP? ¿ellos están dispuestos a apoyarlos con este proyecto?
Si, toda la cadena está de acuerdo en apoyar.
-¿Cuál sería la otra ciudad que se conectaría sin necesidad de ductos virtuales?
La otra sería Pucallpa, donde está el yacimiento (de gas natural) de Aguaytía. Allí nos conectaríamos directamente al yacimiento en esa zona y desde allí tendríamos redes en la ciudad de Pucallpa.
-A las otras doce ciudades dentro de las siete regiones que incorporarían, ¿cómo se transportaría el gas?
Tendrían que ser abastecidas por ductos virtuales para lo cual se construirían plantas de regasificación en esas ciudades y se llevaría el gas natural licuefactado (GNL) en camiones cisterna desde la planta de Melchorita. Para eso ya hay conversaciones con (el operador de esa planta) para poder suministrar a este sistema.
-¿La construcción de esas plantas sería parte del proyecto?
Si, la infraestructura de regasificación sería parte del proyecto, y con eso, podríamos también licitar el transporte virtual del combustible en camiones y comprar la molécula de GNL en Pampa Melchorita, hasta que se hagan los gasoductos (sea el SIT-Gas, o la extensión del gasoducto de Contugas al sur u otros).
Inversiones adicionales
-¿Qué inversión adicional a la que han hecho en su administración, necesitarían para extender su concesión a las siete regiones?
A la fecha, ya tenemos invertido más de S/6,000 millones en Lima y Callao, y este proyecto, de concretarse, nos va a permitir invertir S/1,200 millones adicionales.
-¿Qué se necesita para aprobar este proyecto de Cálidda?
Requiere que se apruebe una adenda a nuestro contrato de concesión, en la cual se incorporen a estas ciudades de forma que nosotros podamos también incluir nuevos compromisos de inversión, e incluirlos en nuestros planes quinquenales de inversión (que aprueba Osinergmin).
-¿Qué más se tendría que incorporar en esa adenda para concretar su nueva inversión?
Nuestro plazo inicial es de 30 años que vencen el año 2033, y para recuperar esos S/1,200 millones de nueva inversión necesitaríamos un plazo adicional que tendría que definir el gobierno bajo las normas de APP.
Plantean ampliar plazo de la concesión
-¿Por qué es necesario ampliar el plazo de su concesión?
Con esa ampliación de plazo de la concesión se busca que se logre el equilibrio económico-financiero de la concesión, es decir que yo no gane más de lo que debería ganar bajo el contrato actual, sino que simplemente se recupera las inversiones bajo ese esquema de inversión. En ese caso el MEF tendría que evaluar y ver cuál es el plazo que corresponde para poder recuperar esas inversiones.
-Más allá de los plazos que determine el Gobierno, ¿qué cálculos ha hecho la compañía respecto a los plazos adicionales que necesitarían?
El cálculo que hemos hecho es que son 10 años adicionales que se necesitarían para recuperar las inversiones, pero como digo eso lo tiene que determinar el Ministerio (de Economía y Finanzas).
-¿Han conversado con el Gobierno para hacer realidad este proyecto?
Sí, ya presentamos la propuesta, posiblemente la están evaluando y nos convocarían para revisarla de acuerdo con los procedimientos vigentes en el marco las APP que es lo que corresponde para este tipo de iniciativas. Esto requiere la opinión del Minem, el MEF y otras entidades involucradas como ProInversión y Osinergmin.
Fuente: GESTIÓN.