Hace poco el Gobierno aprobó un bono no reembolsable de S/ 2,000 para que los conductores, cuyos vehículos hoy consumen GLP, lo conviertan a gas natural vehicular (GNV), con el objetivo de tener una matriz energética más limpia en el Perú y a su vez generar -al conductor que decida aprovechar este bono- mayores ahorros en sus gastos en combustible.
Este beneficio podrá ser utilizado por los conductores en cualquiera de los talleres de conversión autorizados y afiliados al programa. Usualmente, el proceso tarda dos días y cuesta alrededor de S/ 4,000 a S/. 4300. Con este bono el costo de la conversión se reduce en S/ 2,000, y el Estado también ofrece la opción de financiar este saldo con 0% de interés a un plazo de hasta 3 años a través del FISE, por lo que el conductor podría acercarse y solicitar la conversión sin un sol en el bolsillo.
«El bono de S/ 2,000 para las conversiones de GLP a GNV es un beneficio clave que permitirá a los conductores gozar de combustible limpio y barato. Además, es un síntoma de que vamos en la dirección correcta para cumplir los objetivos de masificación del gas natural», indicó Jose Saco, subgerente de movilidad de Cálidda.
Agregó que actualmente existen 340 estaciones de servicio a nivel nacional donde recargar este combustible, además de 170 talleres de conversión.
«Utilizando el GNV se puede ahorrar hasta 70% frente a otros combustibles. Además, la tecnología actual garantiza una conversión limpia y precisa, sin ningún tipo de riesgo para el motor del vehículo», añadió el experto.
Otro beneficio del GNV es la estabilidad en su valor. Al ser un combustible peruano y no depender del precio internacional del petróleo, el GNV se ha mantenido estable en los últimos diez años, frente a las fuertes alzas en los precios del GLP o la gasolina.