Si bien el Gobierno creó una comisión para que presente propuestas para crear una planta de urea, no convocó a Perupetro, aun cuando esa agencia tiene las herramientas que pueden contribuir a hacer realidad ese objetivo con miras a que el país se autoabastezca de fertilizantes.
Así se desprende de las declaraciones que dio a Gestión el gerente general de Perupetro, Daniel Hokama, quien explicó que es factible desarrollar una planta petroquímica sobre la base de la cual se pueda producir urea y otros fertilizantes, aunque ello requiere un apoyo estatal, como el que puede dar la citada agencia.
Luego de la entrada en operación de la planta de Camisea el 2004, en los siguientes años en el país se desarrollaron diversas propuestas del sector privado para construir polos petroquímicos en el sur del Perú, usando el gas natural para elaborar urea.
Sin embargo, esas iniciativas quedaron de lado, debido, entre otros factores, a que Estados Unidos empezó a ofrecer los precios del gas natural (shale gas) más barato que en otros países, lo que desincentivó el desarrollo de la mencionada industria en el Perú.
Se puede bajar el precio del gas natural para una planta de urea
En la discusión que ha surgido sobre qué tan viable es instalar hoy una planta de urea en el Perú, hace poco el ex ministro de Agricultura, Milton Von Hesse indicó, por ejemplo, que el principal problema para ese proyecto es la falta de gas natural a bajo costo.
Sin embargo, para el gerente general de Perupetro (institución a cargo de promover las inversiones en hidrocarburos en el país y aprobar los contratos del sector), es posible obtener menores costos para empresas interesadas en desarrollar la petroquímica con el gas de Camisea.
Explicó que la ley faculta a Perupetro a que, en caso una empresa busque instalar plantas petroquímicas, esa agencia pueda negociar (con el productor del gas natural) regalías distintas (menores) a las actuales.
En ese escenario, y como resultado de tal negociación, según Hokama, se podría reducir el pago de regalías, de forma que (el productor) pueda a su vez disminuir el precio de ese insumo para que sea viable económicamente el desarrollo de una planta de urea u otros fertilizantes.
“La ley nos faculta a negociar regalías especiales para la petroquímica, pero nosotros como Perupetro, lamentablemente no hemos sido convocados a este proceso de análisis”, advirtió.
El Ejecutivo creó, a inicios de setiembre, la comisión de alto nivel antes mencionada, adscrita al Ministerio de la Producción, con el objetivo de elaborar en 45 días un informe técnico que contenga una propuesta de norma para crear una planta de urea y otros fertilizantes nitrogenados.
Además, si bien el Gobierno inicialmente buscaba que sea el Estado el que construya esa planta, pues la norma que creó esa comisión originalmente hablaba de una “planta nacional”, en este mes la modificó, abriendo las puertas para que las empresas privadas puedan desarrollar esa actividad empresarial.
El funcionario señaló que en el país están dadas todas las condiciones para desarrollar la petroquímica, e incluso la infraestructura, en referencia al gasoducto que construyó la empresa Contugas en Ica, para hacer viable esa industria en la zona de San Juan de Marcona, al sur de ese departamento.
De concretarse esa planta, estimó que el Perú podría volverse no sólo autosuficiente en la producción de urea y fertilizantes, sino incluso llegaría a exportar a otros países de la región como Colombia, Chile y Ecuador, que hoy son, al igual que el Perú, importadores de esos insumos para la agricultura.
Visión de TGP sobre desarrollo de planta petroquímica
Asimismo, durante un evento de Perupetro, Tomas Delgado, CEO de Transportadora de Gas del Perú (TGP) -empresa que opera el gasoducto de Camisea- coincidió en que hay condiciones para la instalación de plantas petroquímicas en el Perú, y más bien consideró que el precio del gas natural resulta competitivo para esa actividad.
Sin embargo, señaló que aún se tiene un desafío importante para hacer que ese proyecto petroquímico esté disponible, cómo es atraer a inversionistas internacionales y adaptar el marco regulatorio a ese objetivo.
En general, refirió que hay mucho trabajo por hacer en el Perú para lograr la masificación de gas natural, tanto a nivel de consumidores residenciales como para el transporte, considerando que tiene un precio competitivo y es un combustible de bajas emisiones de elementos contaminantes frente a los derivados del petróleo.
Fuente: GESTIÓN.