A menos de un mes de haber aprobado un financiamiento de hasta US$ 975 millones para el Puerto Multipropósito de Chancay, Volcan reveló que estudia separar sus acciones en dicho proyecto a una nueva empresa. La operación podría no ser más que una reorganización societaria si Glencore no hubiera anunciado en febrero su intención de salir de la minera peruana. Así, de concretarse esta operación, ¿la multinacional suiza aún podría seguir participando en “megapuerto” o más bien se prepararía la venta de éste?
En detalle, Volcan Compañía Minera informó a la Superintendencia del Mercado de Valores (SMV) que evalúa los aspectos económicos, financieros, comerciales y legales de la potencial escisión de los negocios, portuario y logístico, del Puerto de Chancay, en favor de una nueva sociedad a ser constituida por dicha empresa.
Para la emisión del informe de valor razonable relacionado a dicha operación, se designó como entidad externa a Emmerich, Córdova y Asociados S. Civil de R. L.
En dicho proyecto, a cargo de Cosco Shipping Ports Chancay Perú, la minera peruana tiene el 40% de las acciones (el resto corresponde a Cosco Shipping Ports Ltd.), con lo cual Glencore hoy también participa en la iniciativa portuaria.
Si bien esta multinacional explora la disposición del 23.3% de su capital social en Volcan Compañía Minera desde el cuarto trimestre del 2022, no estaría al margen del análisis de la escisión del negocio portuario. Y es que, con dicho porcentaje, tiene aún el control de la empresa peruana.
De esa manera, la separación del Puerto Multipropósito de Chancay en otra compañía le permitiría a Glencore vender sus acciones en Volcan y mantener su participación en el Puerto Multipropósito de Chancay, considerado como el principal hub logístico de Sudamérica.
Para esta multinacional, dicho terminal podría significar un activo clave para sus otros negocios mineros y de trading. En Perú, Glencore también tiene acciones en Antamina y Antapaccay, además de almacén de minerales (Perubar) y comercializadoras de metales (Glencore Perú y Glencore Lima Trading).
Sin embargo, la escisión también podría ser un paso previo a una venta de la participación de Volcan en el Puerto Multipropósito de Chancay.
Consultada por los objetivos de la potencial escisión y si ésta representaría un paso necesario para que la venta implique solo a las acciones en la operación minera, Volcan indicó que no añadirá más información a la que informaron a la SMV.
Glencore y la retención del negocio portuario
Sobre las implicancias de la escisión de activos no mineros de Volcan, el analista de Inversiones y Mercado de Capitales en Kallpa SAB, Anthony Hawkins, consideró que dicha operación sería positiva y permitiría un mayor enfoque en la optimización de las operaciones mineras.
En tanto, recordó que Glencore manifestó su intención de vender su participación en Volcan debido a su poca rentabilidad en los últimos años.
“Los ingresos de Glencore provienen de las industrias energía y minería, por lo que sería raro que quieran mantener los activos logísticos y el puerto, lo cual es un giro de negocio en el que no se especializan”, declaró a Gestión.
Sin embargo, estimó que la decisión final de la venta de acciones tomará en cuenta la rentabilidad esperada del Puerto de Chancay y las sinergias que el mismo tendrá con la exportación de mineral, sobre todo, considerando la cercanía que tiene el mismo con la unidad minera Antamina.
Por su parte, Sebastián Cruz, analista senior de Renta Variable en Seminario & Cia, consideró válida la posibilidad de que la escisión del negocio portuario implique que Glencore desea vender las acciones de la actividad minera, pero no su participación en el negocio portuario.
No obstante, recalcó que esta operación también separa explícitamente cualquier flujo que se pueda obtener entre los accionistas de Volcan y los bonistas de la emisión internacional de US$ 475 millones, realizada el 2021.
“Si bien el puerto no formaba parte de la estructura del bono internacional, la compañía hizo un ‘consent’ para tener la aprobación de los bonistas para separar explícitamente el puerto de Volcán. Con ello se quitan cualquier obligación de que ante una posible venta del puerto, deban prepagar deuda”, explicó.
¿Puerto a la venta?
Para Cruz, los activos “non- core” que Volcan podría vender para mejorar su estructura financiera son las propiedades eléctricas y la cementera en Chile (Cementos Polpaico). Sin embargo, refirió que la minera peruana no ha podido concretar estas operaciones anunciadas.
En ese sentido, ¿la compañía minera podría apostar por vender su participación en el puerto de Chancay tras la escisión? En opinión del analista de Seminario & Cia, esta posibilidad no se concretaría necesariamente en el corto plazo.
“Sí hay interés de venderla, pero tengo entendido que no en el corto plazo. El puerto aún debe concretarse, empezar a operar y luego ya podría empezar a disminuir la deuda utilizada para construirlo y posteriormente pagar dividendos”, refirió.
De esa manera, reconoció que la venta de acciones en el Puerto Multipropósito de Chancay sería más atractiva para la venta.
Avance del Terminal de Chancay
En la actualidad, las obras del nuevo Terminal Portuario Multipropósito de Chancay muestran un avance superior al 40 %. Así, esta infraestructura comenzaría a operar desde el cuarto trimestre del próximo año.
“Las obras tienen un avance de más del 40 % y esperamos comenzar a operar en el último trimestre del 2024′′, señaló el gerente de Asuntos Públicos de Cosco Shipping Ports, Mario de las Casas, a Andina.
Desde abril del 2011, se desarrolla el proyecto de diseño y construcción del puerto de Chancay con una inversión total que superaría los US$ 3,400 millones de dólares, de los cuales se ejecutarán US$ 1,315 millones en la primera etapa.
“Hay una inversión inicial de más de US$ 1,300 millones para un proyecto que será el puerto más importante de Sudamérica y que funcionará como hub regional”, añadió.
Fuente: GESTIÓN.