Los ciberataques contra empresas son cada vez más frecuentes, e incluyen también a los pequeños negocios. Es una tendencia preocupante porque una violación de seguridad puede ser muy costosa y consumir mucho tiempo si los propietarios no tienen un plan para afrontarla.
Según datos del Informe de Investigaciones de Filtración de Información en 2023 de Verizon, el costo promedio por cada ataque con ransomware — en el que se utiliza un tipo de software malicioso diseñado para bloquear el acceso a un sistema computarizado en tanto no se pague una suma en tanto no se pague una suma de dinero— aumentó más del doble en los últimos dos años, hasta alcanzar los US$ 26,000.
Esto se debe, en parte, a que ha habido un notable aumento en el número de ataques con ransomware, que representan 24% de todas las violaciones de seguridad.
Los pequeños negocios deben tener un plan para prevenir los ciberataques. El elemento humano es la causa de 74% de estos problemas, por lo que los propietarios deben asegurarse de que todos los empleados utilizan medidas preventivas, como la verificación en dos pasos, para dificultar el hackeo. También puede ser útil pedir a los empleados que cambien periódicamente sus claves de acceso.
Si la seguridad de su negocio ha sido violada, lo mejor es trabajar con un ejecutivo de ciberseguridad de su empresa o con una empresa externa confiable para que evalúe lo que ocurrió, así como el daño sufrido. Tratar de contenerlo sin tener el conocimiento técnico adecuado podría empeorar las cosas.
También es importante informar a las autoridades sobre lo que ocurrió. En Estados Unidos, los ataques se deben reportar a las autoridades federales en las primeras 72 horas después de que la empresa está razonablemente segura de que ha ocurrido un incidente ese tipo.
Fuente: GESTIÓN