Los años electorales suelen ser periodos de incertidumbre social y económica, por lo que es importante analizar el super ciclo de elecciones que se dará el 2024, el cual comprometerá el 60% del PBI y afectaría alrededor del 54% de la población mundial, de acuerdo con el estudio Perspectivas Geoestratégicas 2024 de EY.
“El 2024 nos depara un super ciclo de elecciones que impactará al mundo, el Perú incluido. Ahora bien, debemos tener en cuenta que naturalmente los ciclos electorales se destacan por ser años de incertidumbre hasta cierto punto; para nuestra economía debemos tener presente que además se trata del periodo electoral de dos de nuestros principales socios comerciales como EE. UU. (noviembre) y Unión Europea (junio), lo cual puede tener mayores implicancias”, resalta Enrique Oliveros, Líder de Estrategia y Transacciones de EY Perú.
En los periodos electorales se presentan diversos riesgos como de seguridad o corte de cadena de suministro por las huelgas, tipo de cambio, inflación, consumo interno aletargado o cauto, entre otros. Para ello presentamos algunas recomendaciones para los negocios:
- Realizar la planificación de escenarios para resultados electorales y políticos
El super ciclo electoral mundial también plantea elevados riesgos sociopolíticos y de seguridad asociados con las protestas, que tienen el potencial de perturbar las operaciones comerciales y crear riesgos para la reputación en algunos mercados. Navegar con éxito por esta dinámica requiere un análisis de escenarios, que consiste en la identificación de múltiples resultados plausibles y la evaluación de sus implicaciones comerciales, desde los ingresos hasta las operaciones. Una vez que se identifican los escenarios potenciales y se comprenden las exposiciones, los ejecutivos pueden ajustar la estrategia y las actividades de gestión de riesgos para capturar las oportunidades identificadas y limitar los riesgos negativos.
“Por ejemplo, existen derivados financieros, que son instrumentos que permiten cierta cobertura ante posibles riesgos de mercado como el tipo de cambio o inflación, que suelen presentar alta volatilidad ante situaciones de índole político como las elecciones”, detalle Oliveros.
- Evaluar las implicaciones de las políticas económicas para el crecimiento y ventas
Las mayores preocupaciones de los votantes sobre la inflación y el crecimiento económico significan que es probable que muchos nuevos gobiernos tengan la política económica en el tope de sus agendas. Podrían así, producirse cambios en la política fiscal u otras políticas nuevas pueden crear oportunidades de ventas y crecimiento, pero es probable que dichas políticas se enmarquen en objetivos de seguridad económica. Los ejecutivos deberán evaluar cómo las políticas de los nuevos gobiernos afectarán las oportunidades y los desafíos en su sector.
- Incorporar estrategias climáticas y de sostenibilidad
La política climática y la incertidumbre regulatoria son inherentes a varias de las elecciones de 2024. Cualquier cambio de este tipo (hacia reducciones de emisiones más o menos ambiciosas) probablemente tendría impactos significativos en las operaciones comerciales, las finanzas, el cumplimiento y la estrategia de las empresas de múltiples sectores. Las empresas deben monitorear los resultados potenciales y los intereses de las partes interesadas en mercados clave y prepararse para evaluar las estrategias climáticas una vez que las perspectivas postelectorales queden claras.